Muchas personas me envidian por haber ganado bastante dinero a una edad tan temprana. Sin embargo, esto ha hecho que me resulte cada vez más difícil encontrar el verdadero amor, siento que nadie podrá amarme. He intentado salir con alguien, acercándome poco a poco, buscando ese tipo de cariño más común: conocerse lentamente, desde las miradas hasta las palabras, desde la ambigüedad hasta la certeza. Pero al final, casi siempre termina en fracaso. Las formas de conocer a alguien son bastante similares: presentaciones de amigos, o siguiendo a alguien en Douyin y luego agregando WeChat. Tan pronto como ellas saben que he ganado dinero en el mundo de las criptomonedas, su expresión cambia: en sus ojos, el mundo de las criptomonedas 🟰 hombres grises. La relación aún no se ha calentado, y ya llegan las pruebas materiales. Algunas piden regalos, unos miles son una prueba, diez o veinte mil es solo el comienzo, y no hay límite en decenas de miles; algunas piden directamente transferencias. Lo que más me duele no es el dinero, sino que sé claramente: ellas no son necesariamente tan materialistas, solo que no son así con los demás, pero conmigo tienen un estándar diferente. He pensado en volver a la escuela para encontrar el amor, pero incluso entre personas de mi edad, todos saben que tengo algo de dinero. Así que me he convertido en una especie de oportunidad, y no en alguien que realmente pueda ser querido. Aunque nunca menciono activamente el mundo de las criptomonedas, cuando salgo con amigos, a menudo soy yo quien paga. Si pasamos un poco más de tiempo juntos, ellas siempre pueden sentir algo. Y de hecho, en cualquier momento podría abrir mi computadora, contestar una llamada o entrar a un Space, y todos pueden adivinarlo a través de la conversación, es casi un enigma. Pero no quiero engañarme a mí mismo, ya que no puedo ser tratado con sinceridad, solo puedo volverme más fuerte. No importa, seguiré ganando dinero. Al menos esta es una cosa que no me fallará.