Lo que realmente me molesta son las empresas de criptomonedas zombis. Recaudaron dinero en 2017/18, no lograron encontrar el PMF y luego fracasaron en sus pivotes, y en lugar de disolver la empresa y distribuir el capital restante, el equipo cobra sueldos elevados mientras envían vapor hasta que se acaben los recursos. Se aferran a las tesorerías como si su estilo de vida lujoso y su trabajo despreocupado dependieran de ello (y así es). Como alguien que literalmente vive mejorando la eficiencia del capital, realmente me toca una fibra.