Me sorprende que Charlie Munger nunca haya aceptado las criptomonedas. Escribe sobre la importancia de crear sistemas humanos que sean difíciles de engañar (ver más abajo). Eso es precisamente lo que son los sistemas de blockchain: sistemas económicos que son transparentes, verificables y operados por reglas simples que hacen que sea muy difícil hacer trampa. Los sistemas de blockchain asumen que cada participante actuará en su propio interés y hará trampa si se le da la oportunidad, y trabajan hacia atrás para crear incentivos y primitivas codificadas e inmutables que previenen y mitigan este comportamiento. Invierte, siempre invierte. Extracto de “Poor Charlie’s Almanack” (pág. 139)