El trading de venganza no soluciona la pérdida. En casi todos los casos, solo la duplica. No estás pensando con claridad cuando haces trading de venganza. Estás reaccionando a tus emociones y tratando de obtener una victoria rápida para tu ego. También es adictivo. Comienzas a creer que el mercado está en tu contra. Una mala decisión lleva a varias más muy rápidamente. El principal problema es que tus emociones están completamente bajo control cuando deberían ser inexistentes. Cuando eso sucede, tu enfoque sereno desaparece y cualquier decisión que tomes durante este tiempo es casi siempre terrible. Lo que deberías hacer en su lugar: - Retroceder. - Reiniciar mentalmente. - Revisar la operación original para ver qué salió mal. ¿Fue solo una mala operación? ¿Qué puedes hacer diferente? ¿Mejor entrada? ¿Mejor invalidación? ¿Te apresuraste a entrar en la posición? Antes de tu próxima operación, necesitas preguntarte: ¿Estoy operando mi sistema o mis emociones? El MEJOR trading de venganza es no operar en absoluto. Tu sistema no tiene éxito si estás forzando operaciones.