Recientemente discutí la prohibición del comercio de acciones para los miembros del Congreso, y parece que ha inquietado a algunas personas, que es exactamente la reacción que esperaba. Este malestar señala que es hora de actuar. Tan pronto como regresemos, planeo impulsar una petición de descarga para avanzar en este asunto. No hay excusa para que esto no se haya abordado ya. Francamente, si otros quieren liderar esto, son bienvenidos a hacerlo, pero no me quedaré de brazos cruzados mientras los miembros del Congreso comercian con acciones, especialmente aquellos en comités con influencia directa sobre las industrias relevantes. Eso es corrupción en su esencia, y necesita detenerse.