Necesitas mantenerte en un estado de alta energía, pero eso es difícil de sostener si no has empujado tus límites o hecho algo que una vez pensaste que era imposible. Recientemente, he hablado con algunas personas, todas cargando dudas, escepticismo y un poco de negatividad sobre su trabajo y vida. Siempre trato de empujarlos hacia el optimismo y compartir mi energía como pueda, porque el optimismo y la claridad no son regalos aleatorios, son ganados. Son recompensas por confrontar tus límites, por atravesar las partes difíciles. Cuando te desafías lo suficiente, algo cambia. Te vuelves más ligero, más enfocado, más vivo. Así que, sé optimista. Confía en que nada es verdaderamente imposible. Reformula la pregunta: no se trata de si algo se puede hacer, sino de si vale la pena hacerlo. La posibilidad es solo una función de la creatividad y el esfuerzo; si vale la pena resolverlo, entonces resuélvelo. Di sí a lo "imposible". Sí, vamos a Marte. Sí, lo resolveremos, a menos que puedas demostrar que es absolutamente imposible. Sí, puedes vivir la vida de tus sueños. Yo digo que sí a todos ellos, y me niego a ser derrotado por lo que solo parece imposible. Espero que las personas a mi alrededor tampoco sean derrotadas por ello. No sobreestimes el poder de pensar y no subestimes el poder de hacer. Sé de alta energía. Hazlo.