Mi cofundador y yo creamos los primeros mapas del tiempo interactivos en Internet, pero no pudimos conseguir usuarios, así que fui y conseguí un trabajo a tiempo completo en un periódico que convencimos para que integrara nuestros mapas. Eso los hizo volverse virales, de repente tuvimos 6 millones de visitantes, pero aún sin ingresos. Intentamos el modelo freemium y finalmente pusimos un muro de pago (lo que nos valió amenazas de muerte de usuarios gratuitos), así que nos volvimos rentables con más de 2,000 clientes B2B. Un día, un cliente llamó y dejó un mensaje de voz diciendo que estaba en la Casa Blanca. No lo creí del todo, pero dejaron un número de devolución de llamada, así que marqué, y respondieron "sala de situación". Cuando el miedo se disipó, dije que estaba devolviendo una llamada. Cuando volvieron a llamar, dijeron que efectivamente eran un cliente y solo necesitaban darme un nuevo número de tarjeta de crédito. También explicaron que nuestro producto estaba en exhibición fuera de una de las principales salas de conferencias de "el jefe". Un año después, Obama decidió visitar Austin, TX como parte de su gira de empleos. Yo había trasladado nuestra startup allí el año anterior. Fui invitado a presentarle (al igual que otros 4), y cuando la Casa Blanca se enteró de quién era, un agente del Servicio Secreto le dijo al incubador que se asegurara de que yo presentara primero. De todos modos, así es como se tomó esta foto. Unos meses después, pude visitar la Casa Blanca para un par de reuniones.
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