Dra. Susan Monarez: “En la mañana del 25 de agosto, el Secretario Kennedy me exigió dos cosas que eran inconsistentes con mi juramento de cargo y la ética requerida de un funcionario público. Me ordenó comprometerme por adelantado a aprobar cada recomendación del ACIP sin importar la evidencia científica. También me ordenó despedir a funcionarios de carrera responsables de la política de vacunas sin causa. Dijo: ‘Si no estaba dispuesta a hacer ambas cosas, debería renunciar.’”