Debería ser posible, de hecho necesario, mantener dos pensamientos a la vez. En primer lugar, a pesar de la amnesia generalizada alrededor del 10/7, el mundo nunca debe olvidar que Hamas es la causa central de la guerra en Gaza y el sufrimiento indecible que ha desatado. La responsabilidad principal de la guerra recae en su causa: Hamas. En segundo lugar, la crisis humanitaria en Gaza es moralmente inaceptable, y todas las partes, incluidos Estados Unidos e Israel, tienen la obligación moral de hacer su parte para aliviar el hambre y las dificultades que se han apoderado de Gaza. A Hamas no le importaba menos si todos los palestinos murieran de hambre. Pero al mundo libre debe importarle. Y más que preocuparnos, debemos actuar para evitar que la crisis se profundice.