Es difícil estimar la probabilidad de que existan computadoras cuánticas capaces de romper la criptografía moderna para 2030. Vitalik sugiere un 20% de probabilidad, pero yo diría que la probabilidad es menor. En cualquier caso, el número exacto no es lo que más importa. El NIST ya ha ordenado la transición a la criptografía poscuántica (PQC) para 2030-2035, y tenemos todas las primitivas necesarias para hacer ese cambio. El verdadero desafío ahora es finalizar qué estándares adoptar y garantizar su implementación. Esto se aplica a todas las industrias, defensa, telecomunicaciones, banca, sistemas de identidad y tecnologías blockchain. Blockchain puede enfrentar obstáculos adicionales debido a su gobernanza descentralizada, pero tenemos a los criptógrafos líderes del mundo trabajando en este problema. Hay mucho en juego y la comunidad ha demostrado que puede moverse rápidamente cuando sea necesario. No hay motivo para alarmarse, ¡solo ejecución enfocada!