Ciertas escorias humanas, provenientes de un oscuro pasado, son fantasmas que no se desvanecen, siempre deseando que la oscuridad del pasado regrese. Se oponen a todo lo que es avanzado y luminoso, por lo que su mayor habilidad es atraer a un grupo de basura inculta, y juntos levantan banderas y gritan, porque esta basura es la más fácil de manipular. La característica más notable de esta multitud desorganizada es que cuanto más carecen, más odian. No tienen cultura, por lo que odian a las personas cultas. No tienen cerebro, así que odian a los inteligentes. Tienen un gusto estético bajo, por lo que odian el arte elevado. Sus ideas son retrógradas, así que odian las ideas avanzadas y vanguardistas. Su pensamiento es superficial, por lo que odian las ideas profundas que no pueden entender. Son mediocres, así que odian a todas las personas sobresalientes. Por lo tanto, estas escorias humanas se unen a esta multitud desorganizada, incitando sus emociones, creando ilusiones para que esta basura realmente crea que están logrando algo. Esta multitud de basura siempre espera que las escorias humanas que apoyan les den un objetivo concreto. El truco favorito de las escorias humanas es etiquetar a las personas; una vez que alguien o un grupo de personas recibe una etiqueta, las miles de personas que les siguen se lanzarán en masa a atacarlas, logrando así un equilibrio psicológico temporal, pero lo que no pueden ocultar es que siguen siendo basura. Quizás con el tiempo se darán cuenta de que todo lo que han hecho es completamente insignificante, que sus palabras y acciones son extremadamente estúpidas, y que su mente ha quedado completamente atrapada, convirtiéndose en un total idiota. ¿Por qué estas escorias humanas provocan disturbios? Primero, por dinero, esto no necesita explicación. Segundo, porque están al borde de la muerte, así que deben hacer su último alboroto antes de morir. Cuanto más cerca están de la muerte, más locos se vuelven, pero quizás nunca entiendan a las personas que veneran. En un gran sistema de cálculo, al final solo son una herramienta dentro del sistema. Si este sistema es un callejón sin salida, no importa cuánto lo apoyes, al final solo será un callejón sin salida. Por lo tanto, la razón fundamental por la que una persona se convierte en escoria humana es la estupidez. La estupidez es un grave defecto moral y un gran defecto de carácter, que finalmente puede llevar a la división de la personalidad. Así que el estado más común que muestran estas escorias humanas es que parecen tener dos personalidades completamente opuestas. Porque no pueden enfrentar lo que apoyan, que en esencia es una masa completamente corrupta. Es como si una persona se enamorara de un excremento; solo puede amar ese excremento y luego girar y comer fideos escoceses. Nunca se comería el excremento, pero esa multitud desorganizada que es manipulada por él se lanzará a comerlo. Cuanto más disfrutan comiendo, más pueden estas escorias humanas sentir que su fe es firme. Y cuanto más agitan banderas y gritan, más pueden encontrar la multitud desorganizada un equilibrio psicológico. Ambos grupos son como una dama y un cliente, consolándose mutuamente, dándose calor. Cuando el negocio termina y se separan, solo queda un vacío y desesperación infinitos.