Como siempre, @MLiebreich acierta en su último comentario. "Yergin y compañía juegan a varios otros juegos. Promueven la llamada falacia de la energía primaria, por la cual la aparente dependencia del mundo de los combustibles fósiles se exagera. La cifra real no es del 80% sino del 68%, debido a la ineficiencia diferencial de los combustibles fósiles en comparación con la energía limpia, que también es pasada por alto por Lomborg, Smil, el Secretario de Energía de EE. UU. Chris Wright y otros. Si piensas que la diferencia entre el 68% y el 80% no es tan importante, piensa en la diferencia entre que la energía limpia cubra el 32% o el 20% de la demanda; en lugar de que una quinta parte de la demanda energética sea satisfecha por fuentes de cero emisiones de carbono, ya es un tercio. La transición está considerablemente más avanzada de lo que sus detractores quisieran que creyéramos."