Estado de ánimo ✊ Los cypherpunks crearon tecnología sin permisos para escapar del control (gubernamental), no para buscar su aprobación. Pero ahora que los gobiernos están abrazando las criptomonedas, tendemos a construir sistemas que parecen criptomonedas en la superficie, pero que no son verdaderamente descentralizados en su interior. En nuestra prisa por la adopción, estamos intercambiando resistencia a la censura por cumplimiento, soberanía por conveniencia, descentralización por escalabilidad. Estamos comenzando a llamar "criptomonedas" a cosas que aún requieren permiso para usarse. La ironía es brutal: la tecnología sin permisos está siendo reemplazada justo cuando se está volviendo socialmente aceptable. Estamos construyendo infraestructuras que algún día pueden negarnos el acceso, y para entonces, será demasiado tarde. Al perseguir interfaces elegantes, la adopción masiva y la aprobación regulatoria, podemos perder el rumbo. Lo que alguna vez fue un movimiento por la libertad podría convertirse en un mercado de conveniencia. Pero la comodidad hoy podría significar control mañana. Lo que llamamos progreso podría resultar, en retrospectiva, ser la silenciosa anulación de todo por lo que lucharon los cypherpunks. ¿Y la peor parte? Nos daremos cuenta solo cuando se nos niegue el permiso.