He estado presente el tiempo suficiente para ver cómo Web2 lleva a los creadores por un camino, pero apenas devuelve valor a la voz original detrás de ello. Así que cuando descubrí por primera vez @campnetworkxyz, vi un plano diferente para internet. Esto es lo que me hizo clic: Camp trata el contenido como propiedad intelectual. ▸ ¿Un tuit? Un activo remixable. ▸ ¿Una canción? Una fuente de regalías. ▸ ¿Incluso un meme? Registrado y protegido, con atribución incorporada por defecto. ➥ Y ese cambio que trata todo lo que hacemos en línea como algo que se puede poseer. Hemos vivido en un mundo donde los modelos de IA raspan internet en busca de datos, los artistas son copiados sin crédito, y las plataformas ganan miles de millones con el contenido de los usuarios sin devolver un centavo. Con Camp, están planteando una pregunta: "¿Y si pudieras registrar todo lo que creas, probar que es tuyo, y dejar que otros construyan sobre ello mientras tú sigues ganando de cada remix, cada reutilización, cada interacción?" ➥ Eso no solo es justo. Eso es poderoso. En la vida real, esto podría cambiar la economía de los creadores. Imagina: ▸ Una rapera de 17 años en Manila publica un verso → 3 años después se remixea en 5 idiomas → ella sigue ganando. ▸ Un diseñador vietnamita comparte una plantilla de meme → utilizada en 100 campañas → él recibe un porcentaje cada vez. ▸ Un poeta sube un breve poema → un modelo de IA se entrena con él → la atribución envía crédito y ingresos de vuelta a la fuente. ➥ Eso es lo que permite la atribución onchain. Camp es una infraestructura para economías creativas, respaldada por la atribución, no por la especulación. Con Camp, dejamos de alquilar atención y comenzamos a construir propiedad. Por eso sigo compartiendo sobre ellos.. Porque si lo hacen bien, Camp no solo cambiará Web3. Cambiará cómo valoramos la expresión misma.