A la luz de la revelación impactante de la semana pasada de que el ICA de Obama sobre la intromisión rusa se basaba en mentiras conocidas por el FBI y la CIA en ese momento, vale la pena revisar el "anexo" del dossier Steele que se incluyó en el ICA. Para cuando se ordenó, redactó y publicó el ICA, Christopher Steele ya había sido despedido como fuente por el FBI por filtrar su dossier a los medios. El FBI sabía que ya no era una fuente, sabían a quién filtró y sabían qué filtró. Y a pesar de ese conocimiento, el "anexo" se refería fraudulentamente a Steele como un "fuente del FBI" al menos 11 veces distintas, incluyendo en el encabezado del documento: "Reportes adicionales de un fuente del FBI sobre los esfuerzos de influencia rusa." El FBI sabía que Steele no era una fuente del FBI en ese momento, pero eligió mentir deliberadamente sobre eso. Más adelante en el anexo, el documento afirmaba que "el reporte de la fuente parece haber sido adquirido por múltiples organizaciones de prensa occidentales, comenzando en octubre." El FBI sabía que Steele se lo había dado a esos medios. El FBI sabía que Steele estaba siendo financiado por la campaña de Clinton. El FBI mintió sobre y omitió estos hechos en el "anexo" del ICA. El "anexo" del FBI también afirmaba falsamente que el reporte de Steele había sido "corroborado." No solo el FBI no corroboró ninguna de las afirmaciones anti-Trump de Steele, sino que era consciente de que muchas eran fabricaciones completas. Además de las numerosas mentiras difundidas en el "anexo" del dossier Steele al ICA, también sabemos que el exdirector de la CIA, John Brennan, mintió repetidamente, incluso ante el Congreso, cuando afirmó que el cuerpo principal del ICA nunca incluyó ni hizo referencia a las afirmaciones del falso dossier Steele. La única pregunta ahora es si Brennan y Comey finalmente serán responsabilizados por la conspiración fraudulenta que todavía están perpetrando activamente contra EE. UU.